Lo mensual.

Es que me duele tanto pero tanto el ovario izquierdo que quiero llorar hasta que con el llanto lo deshinche. Late. O sea. Late ¿Entendés?
¿Late? Para eso está el corazón, gracias eh. Es algo así como que te diga que de repente respiro con el dedo chiquito derecho.
Y mejor me duermo porque lo que vivo hace un par de horas nada tiene que ver con mi nueva filosofía positivista de vida.
O me peleo con él que no deja de intentar entender lo que se siente pero no puede porque no le pasa y no lo soporto ó me voy a dormir.
Algo así como que el secreto básico para calmarme está en lo esencial y simple de la... (sisi, esa debilidad que me hace entregar hasta mis más patéticos estados a otros brazos. Pero es secreta o por lo menos no se dice. A ella le llevó mucho darse cuenta de que conmigo las cosas eran simples cuando era... A veces hasta se lo tenía que decir: 'Ay, pero, si vos sabes que con un poco de ... me calmás!').
Basicamente, lo único que necesito cuando esto pasa es un poco de ese condimento secreto invisible a los ojos comunes.
Hay que animarse a ver con los de la nuca.
No es el caos del mundo. Es el caos de mi mundo temporal y un poco la realidad de que estoy harta de que no descubran el secreto.
Daaaaa, no es tan difícil o si?
-no puedo decirtelo todo, claramente.-
HOLA, DATE CUENTA.

Estar en todo me estresa. Por una vez, o sea una che, quiero hacerme un bollito y tener la puta certeza de que el calorcito más tierno del mundo me abraza.
Sisi, claro, voy a jugar a que existe y no es de mediocre. Más mediocre sería decir que me está por venir y que se mueran todos.
Al menos me queda un poco de esperanza de que algún día mis ovarios y yo no estemos tan solos.
(que me las banque no me hace menos mujer).
Hay un conducto que va derecho (y si cierro los ojos lo veo!) desde afuera hacia mi adentro en el chakra del pecho (el yo).
Que alguien sepa mandar cosas correctas por ese conducto es algo que parece más dificil que encontrarle pié al zapatito de cenicienta.
uff!
Lo necesito hoy.