Me encanta comer mandarina con pedacitos de chocolate Cadbury.
Me encanta tocar canciones de Shakira, Spinetta, The Cure, Boom Boom Kid y Caetano en la guitarra, sin importar sus diferencias musicales.
Me encanta tocar el teclado y componer música para la bebé de mi hermana.
Me encanta charlar un rato más con mis papás cuando dejo de lado mi estado solitario.
Me encanta tomar mate con gente que me cae bien, porque me sacan la acidez.
Me encanta hablar del alma.
Me encanta cantar mis letras y situarme en las situaciones vividas y por ende, llorar.
Me encanta creer en el amor de mi vida.
Me encanta la realidad con todas sus flaquezas.
Me encanta leer.
Me encanta aprender.
Me encanta amar.
Me encanta dar.
Me encanta dormir con mi gata.
Me encanta haber editado este texto que estaba lleno de palabras que te avergonzaban y te desnudaban, Macarena, y poder decirte en unas pocas líneas que no te odio, porque mi alma no se predispone a odiar y prefiere llorar ante el error, y que no quiero mensajeros entre vos y yo. Porque entre tantas cosas que me encantan, una de ellas es no elegirte más. Y no quiero ningún show con vos, porque mi música va por un camino muy distinto a la tuya, y no quiero ninguna lástima, porque no la necesito. Y no quiero que ningún error de tu boca me llegue por ninguna vía de comunicación más.
Me encanta, de verdad, haber cambiado tus defectos por las cosas que más me gustan de mi vida.
hip hip, hurra!!! (con h)
miércoles, 8 de julio de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario